Estados Unidos es campeón de la Nations League en el partido del 2021

Estados Unidos le ganó la final de la Nations League de la Concacaf a México por 3-2 en lo que fue el partido del año y quizá uno de los partidos de la década sin exagerar. El juego tuvo todo: golazos, jugadas, atajadas espectaculares de los porteros, mucha tensión, dos penales en tiempo extra con la tensión del VAR y un héroe que recién ingresó a los 69 minutos, el portero suplente de Estados Unidos, Ethan Horvath.

El encuentro, disputado en el estadio Empower Field de Denver, Colorado, será recordado por ser el de la primera final de la Nations League norteamericana, una idea similar a la de la UEFA.

Ver más: El penal de México que le atajaron a Guardado

Lo empezó ganando México desde el minuto uno con un golazo del Tecatito Corona, que agarró desconcentrado a Estados Unidos. Parecía que el equipo azteca se lo llevaba por arriba porque jugaba y era dueño del balón, pero poco a poco Estados Unidos lo niveló y empató con un gol de Giovanni Reyna, que aprovechó un rebote desde un córner, a los 27 minutos.

Mención especial a los 69 minutos, que es cuando se produce un quiebre en el partido: el portero titular de Estados Unidos, Zack Steffen, sale por lesión y entra quién sería el héroe de la noche, Ethan Horvath. 

México tardó hasta los 79 minutos para meter el 2-1, un golazo obra de Diego Lainez, quien había ingresado apenas un minuto antes. Lainez enganchó dentro del área cual Lionel Messi y sacó un remate fuerte al ras. Ahora sí, parecía de El Tri lo ganaba ya que quedaban poco más de diez minutos. Pero Estados Unidos no estaba dispuesto a rendirse.

Y pese a tener una gran noche, Memo Ochoa no pudo evitar el empate 2-2. Weston McKennie, de la Juventus, conectó magistralmente de cabeza un córner y fulminó al portero mexicano, que terminó adentro del arco. El partido entraba en su zona loca. Horvath hizo dos atajadas sensacionales: una al Chucky Lozano, y otra a Héctor Herrera. Empezaba a ser figura. El juego terminó 2-2 en los 90 minutos y se vino el tiempo extra. Allí el árbitro primero le dio un penal a Estados Unidos, a los 114 minutos, por una falta contra Pulisic, que metió el 3-2 e hizo estallar a gran parte del estadio y tuvo la ayuda del VAR.

El final más loco e inesperado

Era increíble porque Estados Unidos lo daba vuelta de manera heroica. A México se le escapaba y no había nada que hacer. Sin embargo había más, ya que el juez le dio un penal a México por mano dentro del área a los 118 minutos. Creer o reventar. Esta jugada se retrasó mucho por las discusiones y la revisión (otra vez) en el VAR y el penal se ejecutó recién a los 125 minutos. 

Pero fue allí donde el portero Horvath terminó de consagrarse: le atajó el remate a Guardado. Delirio en el banco de Estados Unidos, decepción en el de México. Final de locura, que le sumó la invasión de algunos hinchas y una pelea entre ambos equipos. No faltó nada. El juego terminó y Estados Unidos festejó uno de los partidos más emotivos y locos que se recuerde.

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