Destrozó a Martínez y afirmó que debió irse expulsado
Destrozó a Martínez y afirmó que debió irse expulsado
Javier Castrilli, uno de los árbitros más históricos del fútbol argentino, arremetió a través de las redes sociales contra Emiliano Martínez por su conducta durante la tanda de penales frente a Colombia.
El excolegiado afirmó que Dibu debió haberse ido expulsado y apuntó contra la actuación del venezolano Jesús Valenzuela.
Luego del partido, Castilli utilizó su cuenta para escribir: "Martínez debió ser amonestado por conducta antideportiva antes del penal ejecutado por Mina y expulsado al festejar realizando gestos c/ambos brazos extendidos y simultáneamente llevarlos arriba y hacia abajo en forma reiterada con una inequívoca lectura: haberse "copulado" a Mina",
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Ya al otro día, el exjuez siguió escribiendo sobre el tema: "En la pág. 115 de las Reglas de Juego se encuentra el menú de causas por las cuales DEBE amonestarse por "conducta incorrecta". Martínez debió ser amonestado y luego expulsado por sus gestos. Aprovecho para agradecer todos los "elogios" que me deparan mis compatriotas".
"La importancia de la palabra. Estamos estructurados a través de ella. Influye, presiona, condiciona, engaña, atemoriza, inhibe, distrae... obtener una ventaja deportiva mediante su uso indebido es un acto desleal que afecta la deportividad", agregó.
"Seguir considerando "folclore" prácticas indebidas dentro del fútbol nos espeja como sociedad y condena a quien lo denuncia al escarnio público. ("con la verdad no ofendo ni temo..." José Gervasio Artigas, quién falleció casi en situación de calle en Asunción, Paraguay. Triste...)", siguió.
"Los gestos. Pocos espacios pueden alcanzar al fútbol en cuanto a la carga simbólica que adquieren los gestos. La violencia simbólica en el fútbol se expresa a través de ellos. Es habitual encontrar en él cuestiones sexuales y de género. Proviniendo de los protagonistas es grave".
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Y finalizó: "En el fútbol nos quejamos de la violencia sin embargo la naturalizamos y justificamos (peor aún) cuando nos favorece. Lo de Martínez constituyó un claro ejemplo de violencia simbólica (los gestos - expulsión ) y de distracción indebida (sus mensajes orales - amonestación)".
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