Barcelona fue otra vez una sombra y perdió de local con Las Palmas 2-1
Barcelona fue otra vez una sombra y perdió de local con Las Palmas 2-1.
El FC Barcelona volvió a ser una sombra en LaLiga española y perdió, de local, contra el modesto Las Palmas. Sí, fue un 2-1 inapelable de parte de los dirigidos por Hansi Flick, que no ganan ya hace tres partidos y pueden perder la punta a manos del Real Madrid, si estos ganan sus dos partidos pendientes. El Barça parece perdido y cede puntos ante cualquier equipo. Sandro y Fabio Silva anotaron para el equipo canario, mientras que Raphinha, quizá el mejor culé, anotó el empate transitorio.
¿Tiene que preocuparse Flick? Sí, desde luego. El equipo ya da señales evidentes de cansancio, de desgaste, y recién estamos pisando diciembre. Otra vez, como contra Real Sociedad y Celta de Vigo, no hubo juego, no hubo fluidez, y no alcanza con los nombres propios, como Raphinha o Yamal.
El celta se lo puso difícil desde el principio, le jugó con los dientes apretados, pero a la vez contó con cierta ayuda arbitral. Sandro debió haber sido expulsado por su falta a Balde, que lo sacó de la cancha con problemas respiratorios. Luego Sandro, ex del Barcelona, abrió el marcador, anotando el 1-0. Pero ahí volvió otro drama que Flick parece no advertir: el arco. En Barcelona ataja Iñaki Peña, que no está ni para segunda división. Y se siente. Cada remate al arco que sufre el Barça es gol del rival.
Las Palmas tuvo que patearle al arco apenas dos veces claras, para anotarle dos goles. Una vez que Raphinha había anotado el empate a puro esfuerzo, en una escapada Fabio Silva entró al área y remató sin dramas para poner otra vez a los amarillos arriba, ahora 2-1. Otro remate, otra mala respuesta de Iñaki Peña. Parece que el único que no ve que este portero no tiene nivel es Flick. Y su caballerosidad para con él le cuesta caro. Carísimo.
El 2-1 fue un mazazo. El Barcelona ya no se recuperó. Lo intentó por todas partes, pero de manera desordenada. Lewandowski hoy no apareció, lo que hizo Lamine Yamal ingresando en el segundo tiempo no alcanzó y Raphinha aportó, pero sus compañeros lo ayudaron. La realidad es que el Barcelona a veces puede paliar los males de atrás con goles arriba, pero hoy, frente a un modesto rival, eso no se dio. El Real Madrid acecha y Flick deberá hacer cambios de fondo para no perder la punta.