Así funciona "De Toekmost", la cantera del Ajax, la mejor del mundo
¿Soñaste alguna vez con ser futbolista? Averigua qué se siente y qué les enseñan a los futuros reyes del fútbol europeo.
"De Toekmost" es la cantera del Ajax y sin lugar a dudas es una de las mejores del mundo. Leyendas como Edgar Davids, Clarence Seedorf o Wesley Sneijder han pasado por estas instalaciones.
El proceso para seleccionar grandes estrellas comienza con 80 ojeadores voluntarios que van de ciudad en ciudad observando a los pequeños talentos en los campos de fútbol. Solo existen cuatro ojeadores asalariados que supervisan que los seleccionados cumplan las condiciones de la filosofía de juego cruyffista: buen trato de balón, visión de juego y sobre todo, perseverantes; porque el camino para escalar en la Toekmost es empinado y muchos desertaran en el proceso.
El estilo de trabajo del Ajax está bastante marcado. Para cada posición del campo, se tiene un perfil preestablecido que consta de acciones técnicas, rendimiento motor, principios tácticos y habilidades mentales. Es tal la profesionalización del fútbol base en la Toekmost, que un grupo de científicos de la institución sugirió dejar de trabajar con balones de cuero antes de los 16 años porque podía desarrollar traumatismos cerebrales en los pupilos. Así que comenzaron a trabajar con balones de gomaespuma para reducir el riesgo de sufrir daños.
Existen cientos de libros y tesis explicando la metodología Ajax que se tratará de explicar a grandes rasgos. Los 4 elementos esenciales para el desarrollo de un futbolista según la Toekmost son técnica, inteligencia, personalidad y velocidad. Estas 4 se denominan TIPS (Technique, Intelligence, Personality, and Speed) en inglés. Las TIPS se internalizan en el jugador canterano ya que los entrenadores las convierten en una forma de vida, para crecer y desarrollarse.
El estilo de juego es uniforme y cada entrenador está adoctrinado con métodos y estrategias predefinidas por los directores deportivos. Todos los equipos de menores de 12 años juegan con un 3-4-3, y luego pasan al 4-3-3, si se cuenta con delanteros extraordinarios juegan con un 4-4-2. La escuela es muy incisa en el desarrollo de la inteligencia táctica (movimientos según cada posición del campo) y el desarrollo psicomotor del futbolista. Los pilares de la enseñanza se centran en explicar por qué y cómo realizar cada movimiento. Los canteranos ocupan gran parte de su tiempo en responder preguntas de los entrenadores sobre soluciones y comportamientos a tomar en diversas situaciones del juego.
La posesión del balón es intrínseca a la institución y se alecciona a los muchachos sobre los beneficios de practicar un juego atractivo, rápido, de gran posesión, y circulación de balón. Asimismo, se apuesta por desarrollar la madurez del jugador dándole libertades para decidir qué realizar en cada situación de riesgo. El discurso táctico es tan ortodoxo que el jugador del Ajax tiene que garantizar la adaptabilidad de la filosofía a cada situación de juego a pesar de las barreras que puede generar el rival.
El entrenamiento es duro e intensivo. Se trata de hacerles experimentar desde muy pequeños el desgaste de un partido profesional. Las sesiones duran entre 70 y 80 minutos. Se suele perfeccionar el mantenimiento y la recuperación de la posesión en espacios reducidos.
Las situaciones trabajadas siempre tienen que apegarse al fútbol de alto nivel. Adicional a ello, hasta los 13 años los pupilos no realizan trabajos sin balón y solo se enfocan en desarrollar tres habilidades: recibir el balón en uno o dos toques, dar buenos pases y perfeccionar el movimiento de desmarque.
El espíritu y legado filosófico de Johan Cruyff vivirá siempre en la Toekmost. El sueño de cada niño alimenta las ilusiones de jugar un día en el Ámsterdam Arena y los demás templos del fútbol europeo. Según el CIES Football Observatory, por el Ajax han pasado 22 jugadores que juegan actualmente en las 5 grandes ligas como titulares convirtiéndose así en el mejor trampolín para brillar en Europa. No es mala idea tratar de ingresar a su institución, ¿verdad?
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