Fue uno de los peores fichajes del FC Barcelona: "Solo quería ser millonario"
Fue uno de los peores fichajes de Barcelona: "Solo quería ser millonario".
Esta temporada 2022-23 del FC Barcelona es sin dudas histórica. Por los grandes fichajes que el club hizo, renovando la esperanza a los hinchas con un equipo de verdad fuerte: Robert Lewandowski, Raphinha, Jules Koundé, Franck Kessié y Christensen que han enriquecido notablemente a la plantilla para volver a ganar la liga, como pidió Xavi Hernández. Pero también es importante el trabajo de salidas, para limpiar al equipo en lo deportivo y para terminar de borrar la imagen que dejó la gestión pasada.
Con el culebrón que se dio con Frenkie de Jong (tenía una oferta del Manchester United), la directiva de Joan Laporta descubrió que la renovación de contrato del holandés junto con las de Lenglet, Ter Stegen y Piqué, todas de octubre de 2020, eran operaciones ilegales. Si bien la táctica para presionar al jugador con este dato no fue la correcta, se vuelve a hacer foco en la lamentable administración de Josep María Bartomeu.
Los años infames de Bartomeu
Con Bartomeu fueron años de pésimos fichajes que perdieron al club tanto en lo deportivo como en lo económico, y han dejado muchas dudas desde lo administrativo. Laporta evitó chocar de frente con Bartomeu, ya que eso sería meterse con Sandro Rosell, anterior presidente a Bartomeu, y provocaría una pelea desproporcionada, dado el poder político que aún conserva Rosell. Pero la debacle del FC Barcelona en fichajes empezó hace unos 12 años, en la temporada 2011-12, con Rosell al mando.
El primer fichajes sospechoso
Uno de esos fichajes que inauguró toda una década infame en el FC Barcelona es sin dudas el del camerunés Alex Song. Llegado desde el Arsenal en agosto de 2012, Song supo desde antes de poner la firma que no iba a cambiar nada ni a aportar en lo deportivo al club y entonces lo tuvo claro: "Yo solo quería ser millonario". Esa fue su franca confesión años después en una entrevista con su compatriota y estrella de la NBA, Pascal Siakam.
"Cuando el Barcelona me ofreció un contrato y vi cuánto ganaría, no lo pensé dos veces. Sentí que mi esposa y mis hijos deberían tener una vida cómoda una vez que yo termine mi carrera. Conocí al director deportivo (que en ese entonces era Andoni Zubizarreta) y me dijo que no jugaría muchos partidos, por eso no me importó porque sabía que me haría millonario" reconoció. La aventura de Song en el Barcelona fue lo que se esperaba: apenas jugó 20 partidos de liga en la temporada 2012-13 y otros 19 en la campaña 2013-14 hasta que allí llegó el momento de partir.
Song tuvo la chance de jugar con leyendas en el Barcelona como Lionel Messi, y otros cracks en su posición, el mediocampo, como Xavi Hernández, Iniesta, Sergio Busquets, Javier Mascherano, Cesc Fabregas y Thiago Alcántara. Pero desde luego que no le interesó. Ya en sus años en el Arsenal disfrutaba de la buena vida y hacía locuras: "Iba a entrenar y veía a Thierry Henry aparecer con un auto que era una verdadera joya. Me dije a mí que quería el mismo coche a cualquier precio. Fui al concesionario y me compré el mismo. Pero juro que me arrepentí y tuve que devolverlo a los dos meses porque todo mi dinero se estaba yendo en el combustible. Al final me terminé comprando un Toyota".
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En el Arsenal fue su mejor momento, en donde jugó entre 2006 y el 2012. Tras los dos años en el Barcelona, Song fue cedido al West Ham de regreso a la Premier League, pero ya nada fue igual. Su última aventura en Europa fue en el Sion de Suiza y terminó mal, ya que fue despedido durante la pandemia, en 2020: "Recibí un mensaje de Whatsapp para decirme que tenía que firmar un documento informándome que mi salario estaba bajando y que me iban a pagar alrededor de 12.000 euros. Al día siguiente, recibí el documento de despido sin explicación" relató sobre esto.