Maldita corrupción: Una selección africana está a punto de desaparecer

 Kenia, ese país de grandes atletas cuya capital es Nairobi, está viviendo una crisis institucional enorme que ha ocasionado la intervención de la FIFA. Tras la última victoria sobre Ruanda por 2 a 1, en un duelo de eliminados, Kenia podría haber jugado su último partido tras un dictamen de la FIFA.

El primer gol para los kenianos lo anotó Michael Olunga y el segundo fue de Richard Odada. Mientras esto ocurría, el presidente de la Federación de Fútbol de Kenia, Nick Mwendwa, rendía cuentas ante los tribunales. El motivo era aclarar en qué se gastó los 6 millones de dólares que el gobierno keniano le dio a la federación.

Mwendwa había sido arrestado días previos al encuentro mientras visitaba a los jugadores en la concentración. El ministro del deporte de este país decidió disolver la institución y reemplazar a todos los líderes por nuevas personalidades.

Sin embargo, como es sabido, la FIFA prohíbe la intromisión de los gobiernos en la federación y se podría decretar la suspensión de esta selección. El ente regulador exige que Mwendwa regrese al poder así como todos los anteriores líderes. Sin embargo, parece que Kenia no cumplirá las demandas ya que ni siquiera ha respondido la advertencia.

La FIFA tendrá muchos problemas en este continente tras la última fecha. Sudáfrica apelará el arbitraje de su último partido con Ghana que lo dejó fuera del Mundial tras el cobro fantasma de un penal. Además que se tendrá que investigar varios equipos arbitrales acusados de inclinar la balanza. 

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