Rubiales fue detenido apenas pisó España: lo liberaron y quedó imputado
El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, fue detenido, le tomaron declaración y quedó en libertad, pero seguirá siendo investigado.
Un segundo procedimiento judicial se abrió contra el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales. Tras la petición de dos años y seis meses de cárcel por el beso no consentido que le dio a la futbolista Jenni Hermoso en el Mundial de fútbol femenino, el ex directivo fue detenido por la Guardia Civil al aterrizar en Madrid al llegar desde República Dominicana debido a una investigación sobre presunta corrupción, administración desleal y blanqueo de capitales durante su mandato como presidente de la RFEF.
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Al aterrizar en el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas, a Rubiales lo esperaron los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil para detenerlo. El motivo fue porque es sospechoso en una investigación por corrupción y se le pidió que compareciera ante un tribunal local, tras declarar recuperó su libertad, según informó la agencia de noticias EFE.
La acusación contra Rubiales
Luis Rubiales es investigado por supuestas irregularidades durante los últimos cinco años en varios contratos de la RFEF, entre ellos los del traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudita. La causa está a cargo del Juzgado de Majadahonda (Madrid) y apunta contra el exmandatario del fútbol español por presunta gestión desleal, corrupción empresarial y blanqueo de capitales.
El pasado 20 de marzo, la policía detuvo a siete empresarios y abogados presuntamente vinculados a la causa. Los agentes fueron a detener a Rubiales ese mismo día, pero el arresto no se produjo, ya que el expresidente de la RFEF estaba en República Dominicana.
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Rubiales quedó en libertad y a la espera de ser citado por la jueza del Juzgado de Instrucción Número 4 de Majadahonda, que está investigando la caso. Se le notificó su imputación. En septiembre de 2023, dimitió como presidente de la RFEF y un mes más tarde fue inhabilitado por la FIFA para toda actividad futbolística durante tres años por besar en los labios sin consentimiento a la jugadora Jenni Hermoso tras la consagración de España en el Mundial femenino, por esto los fiscales solicitaron una pena de dos años y medio de prisión tras acusarlo de agresión sexual y coacción.