Con la frente en alto: Peñarol ganó pero no le alcanzó para remontarle a Botafogo
El Manya ganó 3-1 pero no le fue suficiente para la épica
Peñarol se enfrentaba a Botafogo por la vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores 2024. El equipo de Diego Aguirre llegaba con la necesidad de algo similar a un milagro para siquiera soñar con empatar tras perder 5-0 en la ida en Brasil. Un resultado que en primer momento parecía dejar a esta contienda como un duelo innecesario pero los futbolistas del Manya no lo veían así.
Poco a poco, los de Aguirre lo fueron llevando al equipo brasileño contra su área, pero a la media hora de juego llegó un golazo brutal de Jaime Báez, que encendía la ilusión entre los hinchas de el Carbonero. El mediocampista uruguayo sacó un bombazo letal de más de 25 metros que sorprendió a John y que fue imposible de cubrir para él ya que se clavó en el ángulo superior como un misil.
Pero la ilusión pareció durar hasta el entretiempo donde el arquero Washington Aguerre se fue expulsado por agredir a John, el guardameta de la visita. El uruguayo fue directo para encarar a su colega brasileño y le pisó un pie de atrás. Inmediatamente se armó una escena y el árbitro no dudó en sacarle la tarjeta roja al golero, que dejó con uno menos a su equipo en un momento delicado.
Pero como si todo esto fuera poco, y cuando parecía que el partido no podía vivir más situaciones insólitas, el árbitro Piero Maza se encargó de tomar la decisión más difícil de explicar. El colegiado cobró en primer lugar una mano de Gúzman Rodríguez, y no deja seguir la jugada que terminaba en gol de Vitinho.
Una jugada que tendría una revisión del VAR, y que lluego de ser vista por el propio Maza fue anulado el penal en favor de Botafogo, y no solo eso, sino también el gol, ya que fue luego de que el árbitro decida parar el juego.
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Apenas unos minutos después de esta acción, llegaría la jugada que reviviría la esperanza de los hinchas de Peñarol. Un centro pasado de Lucas Hernández que Báez aprovecha y saca nuevamente un bombazo que ponía a los de Aguirre en partido otra vez.
El encuentro parecía seguir tornandose en favor de Peñarol, cuando el urguayo de Botafogo, Mateo Ponte, realizó una infracción durísima sobre Báez para acumular su segunda tarjeta amarilla y dejaba al Fogao con diez jugadores también. Aún así, los de Artur Jorge aguantaron hasta el final e incluso descontaron de la mano de Thiago Almada en una contra que parecía sellar el encuentro.
Apenas un minuto después, justo tras el saque de mitad de cancha, llegaría otro gol de Peñarol que respondió rápido con un pase bombeado de Rodrigo Pérez que habilitó a Facundo Batista y dejó espacio para un giro final de emoción en el Centenario.
Pero el árbitro añadió apenas cuatro minutos, y a los de Diego Aguirre no les alcanzó para más. Así fue como Peñarol finalmente quedó eliminado y Botafogo irá a la primera final de Copa Libertadores en su historia.