Olivera fue agredido, se desmayó y Central recibiría la peor sanción de todas
El uruguayo fue violentamente agredido por la hinchada de Rosario Central y preocupa su estado
La victoria por 1-0 de Rosario Central frente a Peñarol por la fase de grupos de la Conmebol Libertadores quedó totalmente opacada por una lamentable agresión a Maximiliano Olivera por parte de la hinchada del Canalla al término del encuentro. Un proyectil impactó en la cara del futbolista uruguayo, que perdió sangre y tuvo que ser frenado por sus propios compañeros por que reaccionó con insultos hacia los hinchas.
Cuando llegó al vestuario del Gigante de Arroyito, el lateral izquierdo se desmayó por la pérdida de sangre y fue trasladado a un hospital de Rosario para suturarle la herida y ser sometido a una radiografía luego de la agresión sufrida. Las autoridades de CONMEBOL presentes en el estadio tomaron notas gráficas de lo sucedido en el final de Rosario Central-Peñarol, y además el club aurinegro hará las denuncias formales al respecto.
Una agresión directa a un jugador es pasible de una sanción pesada para un club tal cual lo establece el código disciplinario de la CONMEBOL, incluso ya hay rumores de que el equipo podría no jugar nuevamente en su estadio. Además, en CONMEBOL ya evalúan la posibilidad de que Rosario Central no tenga la posibilidad de llevar hinchas a Uruguay, y así evitar una represalia por parte de los hinchas de Peñarol.
Tras el incidente, Olivera usó sus redes sociales para mandar un mensaje contundente: "Estoy bien más allá del dolor y los puntos de sutura. Dolido por el resultado pero con mucha bronca por el pésimo trato que recibió nuestra gente. Una vergüenza".
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Así quedó Olivera
Luego de la agresión, se conoció la foto de Maxi Olivera ya dentro del vestuario y plenamente consciente, una imagen que por un lado trajo tranquilidad a la familia y a los aficionados del Manya, pero que también desató la furia en las redes por la agresión que sufrió el urguayo.
En la previa del encuentro, la hinchada de Rosario Central presente en el estadio ya había generado conflictos, tirandole asientos y vallas a los hinchas de Peñarol. En el club uruguayo también hay mucho enojo con la directiva de Rosario Central, considerando que no hicieron todo lo posible para evitar este escándalo.