Victoria con festejo doble: Sao Paulo eliminó a Nacional y lo gritan en Argentina
El equipo de Luis Zubeldía se metió a los cuartos de final de la Libertadores
Sao Paulo le ganó 2-0 a Nacional de Montevideo por la vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores 2024. El conjunto de Luis Zubeldía fue sumamente superior a los de Martín Lasarte, que no pudieron aprovechar la ida y se quedaron con las manos vacías. El 'Tricolor' impuso las condiciones del encuentro con la jerarquía individual y se metió a los cuartos de final donde se medirá con Botafogo.
En el primer tiempo llegaría el 1-0 de la mano del paraguayo Damián Bobadilla que sacó remate brutal de media distancia imposible para el panameño Luis Mejía. Un gol que fue reacomodando el partido y bajó las armas de Nacional. Luego de la revisión del VAR, el árbitro Jhon Osorio convalidó el tanto que se gritó dos veces en el Morumbí.
Al comienzo del complemento, cuando Nacional buscaba reacomodarse, llegaría el gol de Jonathan Calleri para liquidar la serie. Un gol que consiguió con un gran cabezazo tras el centro de Wellingotn Rato que se la dejó servida al argentino para que explote Zubeldía y todo el banco de Sao Paulo.
Un gol que fue gritado también en Argentina, ya que con la victoria de Sao Paulo, el conjunto brasileño le aseguró a Boca Juniors la clasificación al Mundial de Clubes 2025. Nacional dependía de hacer una mejor campaña en Libertadores para arrebatar el cupo de los Xeneizes.
Ver más: Era más fácil hacerlo que errarlo: la pésima definición de Marc Guiu sin arquero
El dramático momento de Izquierdo
Cerca del final del partido el defensor uruguayo Juan Izquierdo se descompensó en el medio del campo de juego. Un momento realmente impactante, ya que se cayó solo sin que nadie lo toque y fue su compañero Nicolás Rodríguez el primero en asistirlo. El central había ingresado por Sebastián Coates en el entretiempo.
Rápidamente, Jonathan Calleri y el arquero panameño de Nacional Luis Mejía llamaron desesperados a la ambulancia que tardó poco más de 40 segudos en llegar al centro del campo de juego para atender al defensor. Un momento que encendió la preocupación de todos los presentes y desató un silencio de preocupación en el Morumbí.