Jurgen Klopp: el premio de sostener una idea en el tiempo
El técnico alemán Jurgen Klopp ubicó al Liverpool Football Club nuevamente entre los equipos más temibles de Europa.
Jurgen Klopp inició su temporada de la mejor manera con el título de la Community Shield tras la victoria del Liverpool FC sobre el Manchester City, uno más para una rica vitrina personal que ya le dio otros 7 campeonas al club. Con la llegada del alemán, los Reds volvieron a estar en los primeros planos, pero lo más importante, lograron una identidad de juego reconocida por propios y ajenos sostenida en el tiempo.
El entrenador inicia su séptima temporada en Liverpool, reemplazando a Brendan Rogers y el crecimiento es asombroso. Los Reds son una potencia no solo en Inglaterra sino a nivel mundial, como en sus años dorados, para lo que la mano del entrenador fue clave.
Los resultados están a la vista: el Liverpool consiguió un título de Premier League tras 19 años pero lo más valioso es que volvió a competir y a dar pelea en cada Liga: cuarto en sus primeras dos campañas, subcampeón en la tercera, campeón en la cuarta y en las últimas dos ediciones terminó escolta del millonario City. En los diez años previos al alemán, el club fue solo una vez segundo y después osciló entre el cuarto y el octavo lugar.
Klopp formó una estructura. Tras el error clave de Karius en la final de la Champions League 17/18, encontró en Alisson un arquero confiable que fue número puesto. Los cuatro defensores de su sistema predilecto tienen tres nombres que salen de memoria: Alexander Arnold, Robertson y Van Dijk ya acumulan 6 años jugando juntos, siendo el segundo zaguero el que ha rotado en el tiempo.
En la mitad del campo ocurre algo similar con Henderson y Fabinho que llevan 5 años consecutivos. El tercer volante ha cambiado, pero es solo una pieza la que el entrenador ha modificado según la ocasión.
Arriba, consolidar un tridente que se convirtió en uno de los mejores del último tiempo fue otro de sus grandes aciertos. El Liverpool gastó entre los tres 120 millones y los réditos dieron súper habit: 355 goles en total marcaron Salah, Firmino y Mané, una marca brutal.
A nivel continental, el club volvió a ser importante. Lejanas habían quedado los cinco títulos de Europa, el último en 2004/2005. Liverpool volvió a ser un equipo copero y temible que en 6 ediciones con Klopp en el banquillo, ganó una, llegó a otras dos finales más cuartos y octavos, siendo el de mejor rendimiento en su país.
Comprar lo justo y necesario es su filosofía. En cada mercado, el entrenador pide lo que cree hace falta y no más. Solicitó a Mané en su primer mercado y vaya si acertó cuando no lo conocía nadie. Al año siguiente, llegaron Salah, Van Dijk y Robertson, más que aprobados. Keita, Alisson y Fabinho le dieron un salto de calidad enorme al año siguiente mientras que para la 19/20 apenas gastó 8,5 en Minamino.
66 millones en Thiago y Diogo Jota (20/21) y 87 entre Luis Díaz y Konaté para la (20/21) no son sumas gigantes si tenemos en cuenta el rendimiento de cada uno. Recién los 100 millones por Darwin Nuñez suenan a mucho pero el uruguayo en su primer partido oficial anotó en el título de la Community Shield y se empezó a pagar.
Mundial de clubes, Supercopa Europea, dos Copas de Liga, una FA Cup y la reciente Community Shield completan un palmarés envidiable. Acierto de una dirigencia que lo fue a buscar tras su tremenda labor en Borussia Dortmund y que le dio las herramientas y el tiempo para que pueda desarrollar su idea de juego.
Iniciando su séptima temporada en Anfield, Klopp tiene contrato hasta 2026, instalándose entre los 5 entrenadores con más años en un ciclo en el club detrás de Tom Watson (1897-1915) George Kay (1936 a 1951) Bill Shankly (1959 a 1974) y Bob Paisley (de 1974 a 1983).
Premier League, Champions League y la dos Copas nacionales son los objetivos que tiene el Liverpool FC por delante, ya con la Community Shield en el bolsillo. La ambición de Jurgen Klopp, una vez más, va por todo.
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