Messi avisó: A disfrutarlo mientras siga
Lionel Messi transita sus últimos momentos en el seleccionado Argentino
Después de girar, conducir, gambetear, convertir y cantar, Lionel Messi habló frente a los micrófonos. No se lo escuchaba desde hacía rato, quizás desde la última vez que había jugado para la selección, otra demostración de lo que se diferencia su comodidad para la selección con lo que encuentra en París. Y el que habla poco, dice mucho.
Messi dijo que después del Mundial "tendré que replantearme muchas cosas". Dijo también que falta tiempo para ese momento, pero no aseguró que siga poniéndose la camiseta del seleccionado. Sorpresa. Cambio de eje. La noche placentera agregó un tema de conversación y especulación. ¿Realmente Lionel se imagina un futuro sin la selección? En 2016 renunció y dio marcha atrás rápidamente. No había sido la primera vez: en 2014 había amagado que no estaría más, pero una pregunta del técnico Gerardo Martino le hizo replantear la idea: "¿Estás preparado para estar afuera del lugar que te gusta tanto?".
Si lo proyecta ahora, seguramente será para hacer una evaluación de su nivel y sus pretensiones. Tal vez esta temporada en el PSG le haya hecho meditar cuánto más quiere y puede jugar en un contexto competitivo. O, probablemente, entienda que pase lo que pase en Qatar él ya habrá dado todo con la camiseta argentina.
Vienen meses de conjeturas. Y sobre todo de ilusión en la Argentina. El equipo nacional juega como tal: comprometido, solidario si hace falta, sintiéndose ganador, lo que en el fútbol se ve como la confianza fundamental. Cuando Messi no está, la selección demostró saber sobreponerse. Cuando está, generalmente sigue siendo la figura de cada partido.
Hoy lo activa Ángel Di María. Y lo acompaña Rodrigo De Paul. Y lo busca Leandro Paredes. Y lo sostiene un grupo entero. Todos presionan, todos tratan de jugar. Pocos convierten, lo que se transforma en un objeto de debate: ¿Quién debe ser el 9 cuando Lautaro Martínez no está?
Más allá de esas dudas mínimas, lo concreto es que Argentina recuperó terreno perdido en estos años. Que al Mundial de 2018 llegó como un conjunto de apellidos. Y que al del 2022 llegará como un equipo consolidado. Volvió a imponerse desde lo colectivo. Esa mejoría cobija a Messi, que podrá ser "uno más en el vestuario", como contó Lionel Scaloni en la semana. Pero siempre será el que brille dentro de la cancha. Por lo menos, hasta que él decida apagar su luz.
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