Los dos detalles invisibles del golazo con el que Tigres venció al América
La asistencia fue de Córdova y la resolución de Flores. Hubo una preparación sublime y una ejecución perfecta.
Tigres logró vencer de una buena vez por todas al Club América y se tomó revancha de las últimas derrotas en manos del equipo de Coapa. Auque un partido de fase regular no es lo mismo que una final, los de la Universidad Autónoma de Nuevo León disfrutaron de esta victoria de manera especial.
En primer lugar porque el gol del triunfo llegó a 3 minutos del final del encuentro. Segundo, porque los Felinos jugaron de local y eso le dio un tono especial al festejo de la afición, que llenó el Estadio Universitario y celebró la conquista de los tres puntos de manera diferente.
Y tercero, porque los Auriazules lograron la diferencia en el marcador con un golazo de Marcelo Flores que tuvo dos detalles "invisibles", de esos que no muchos notaron, y que fue perfecto en su concepción para terminar con el balón dentro del arco.
En análisis del gol
Todo comenzó con un tiro libre a pocos metros del área grande a favor de Tigres. La ejecución fue una jugada preparada brillante, gestada en la cabeza de Veljko Paunovic, y llevada adelante a la perfección por los jugadores.
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Cuando todo hacía pensar que Francisco Córdova iba a rematar al arco y a buscar el ángulo de Luis Malagón, Marcelo Flores se desprendió en silencio de la jugada y se mostró como opción en soledad por el costado izquierdo del área grande de las Águilas. Nadie de los dirigidos por Jardine se dio cuenta ni tomó esa marca.
Pero después hubo un segundo detalle fundamental cuando Córdova tocó rasante con su compañero, y fue el dominio perfecto que Flores tuvo de la pelota. En el mismo movimiento que el elemento paró el balón, quedó perfilado con el paso hacia adelante de cara a la portería americanista.
El resto dependió de la precisión de su remate cruzado, que si bien no fue potente, ingresó justo entre las manos de Malagón y el palo izquierdo del guardameta, y con la velocidad exacta para que ningún jugador Azulcrema lograra interceptar el tiro.