Acá está Argentina: triunfo clave con sus formas de siempre
La Selección Argentina brilló ante Polonia y mostró todo lo mejor de la era Scaloni.
Apareció Argentina. El equipo 36 partidos invicto, el campeón de América. Sólido, compacto y eficaz. No hubo nervios y el circuito fluyó para derrotar a un amarrete Polonia con un merecido 2 a 0. Los europeos se enamoraron del punto que los clasificaba primeros y se crucificó cediendo la pelota.
Scaloni volvió a acertar. Otamendi-Romero se devoraron a un solitario Lewandowski y por las bandas, Acuña y Molina fueron importantes en sus proyecciones en ataque. El primer gol es centro del lateral de Atlético para la definición de Alexis.
Tres volantes para maniatar con posesión a un adversario que copó con cinco hombres la mitad del campo pero sin juego ni conexiones. La tenencia es clara: 67% de Argentina, con Enzo Férnandez triángulo del vértice más De Paul-Mac Allister de internos. 858 pases en total, 137 entregas correctas de De Paul y 86 de Enzo. De ahí nació el fútbol que metió a Polonia en su arco.
La Selección Argentina brilló en el campo ante Polonia.
En ataque, Messi suelto por todo el frente de ataque, Di María a perfil cambiado contra la raya derecha en el inicio (luego cambió de banda) y Julián Álvarez, una máquina de meter diagonales. El 9 fue importante por el desgaste y porque con su vértigo abrió a la dupla de zagueros polaca. Tuvo dos generada por sus movimientos, además del golazo.
Ni el penal que la muralla de Szczesny (9 tapadas) le contuvo a Leo en el final de la primera parte quebró la idea. Argentina se fue al descaso en cero y a un gol árabe de volver a casa. En el complemento, el tanto tempranero de Mac Allister rompió el partido pero fue una consecuencia producto de la paciencia en la elaboración.
Scaloni sacó a un extenuado Di María para armar línea de cuatro volantes con De Paul, Paredes, Fernández y Macallister. Adentro también Tagliafico por un amonestado Acuña. Con esos intérpretes, la tenencia de la pelota fue absoluta.
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Fue, sin dudas, la mejor versión albiceleste en Qatar. Después del traspie en el debut con Arabia, luego del manojo (entendible) de nervios con México, Polonia exhibió las formas y la idea del proceso Scaloni.
Se vendrá Australia en octavos, tras adjudicarse el grupo y evitar a Francia. Más allá en el horizonte, en cuartos tampoco hay cuco a la vista (Países Bajos o Estados Unidos). Acá está el verdadero Argentina, bienvenido a la Copa del Mundo.
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