La rompe en Europa y Scaloni nunca lo llama: "No sé qué hacer"
La rompe en Europa y Scaloni nunca lo llama: "No sé qué hacer ya".
"Muchas veces me pregunto cómo logro que Scaloni me vea" se pregunta con cierta desesperanza Giovanni Simeone, delantero argentino que es sensación en la Serie A de Italia. El hijo mayor del Cholo Simeone viene haciendo ruido hace rato en Europa a fuerza de goles, pero ese ruido parece que termina de llegar a los oídos del entrenador de la selección argentina, Lionel Scaloni, uno de los dos Lionel que pisa fuerte en la Albiceleste. Y con semanas de distancia del Mundial 2022, la queja ya suena a resignación.
Bombazo total: se lesionó y se quedaría afuera del Mundial con Argentina
El Cholito, como le dicen, anotó un gol en la victoria del Napoli por 4-1 de visitante sobre el Cremonese. Fue el 2-1 parcial, el que encarriló la victoria. Y con ese ya son 4 goles en este curso 2022-23, dos en el torneo doméstico y dos por la Champions, 21 goles en la última temporada y media. Números que no logran llegarle al DT de Argentina.
En una nueva entrevista, esta vez a La Nación, Simeone hijo se sincera sobre sus pocas chances de ir al Mundial, aunque soñar no le cuesta nada: "Muchas veces me pregunto qué me falta y cómo logro que Scaloni (Lionel) me pueda ver. Llegué a preguntarme si estaré al nivel de poder competir y me cuestiono qué cosas debo mejorar para poder pertenecer. Quizá solo sea tener paciencia y esperar mi momento. Por eso, siempre voy a estar preparado".
Lo curioso del caso es que Gio Simeone sí jugó con Scaloni, en el debut del entrenador, allá por septiembre de 2018 post Mundial de Rusia. Anotó un gol en el 3-0 contra Guatemala, y seguiría siendo convocado en la segunda mitad de 2018. Reapareció dos años más tarde, en septiembre de 2020 por una doble fecha de la Eliminatoria, pero luego no volvió a sonar. Con el grupo formado y afianzado en la obtención de la Copa América 2021, sus chances se achicaron mucho. Hoy solo la lesión de un fijo podría darle alguna posibilidad.
Simeone es consciente de la competencia: "Hay muchos buenos jugadores y el grupo está muy fuerte, entonces se hace difícil entrar a un lugar en el que todo marcha bien. Lo único que tengo que hacer es estar listo para poder ofrecer mi granito de arena". Pero esto no le impide soñar: "Cada domingo cuento con la posibilidad de demostrarle a Scaloni que quiero estar. La Selección es un lugar único y si no estoy ahora, mañana iré de vuelta para intentar convencerlos a todos". Este mes de noviembre debería ser clave. O más de lo mismo.