El mediocentro ofensivo ya conoce el fútbol mexicano.
El juego entre los Cañoneros y Tijuana tuvo un peculiar detalle que no pasó desapercibido para los televidentes.
Lo firmó Luis Amarilla, el atacante paraguayo que tuvo una noche soñada en el Coloso de Santa Úrsula.
El '10' del elenco de Guadalajara fue separado del plantel por indisciplina, y la dirigencia dejó en claro su postura.
El defensor llegó libre a la Liga MX luego de su intento frustrado por llegar al "Xeneize", y el nuevo dueño de su pase le lanzó una indirecta al elenco argentino.
Pasó meses sin equipo y ahora jugará para el equipo de Mazatlán.