Chelsea necesita más de Enzo Fernández para soñar con la Champions League
El argentino tuvo un partido discreto y debe mejorar su rendimiento para convertirse en líder futbolístico. Un necesitado Chelsea lo espera.
Enzo Fernández está en proceso de asimilación al cambio gigante de su vida deportiva. En menos de dos años, el volante pasó de jugar en Defensa y Justicia a ser campeón del Mundo y refuerzo estelar del Chelsea. Si bien es cierto que sus destellos siguen inmaculados, Les Blues necesitan otra versión del argentino por el que pagaron una verdadera millonada si quieren permitirse soñar en grande.
Real Madrid, en el mismísimo Santiago Bernabeú, fue una vara ideal para medir al creativo de apenas 22 años: "Miedo no, respeto sí", había declarado en la previa el ex jugador de River Plate. Justamente eso hubo, respeto contra el más ganador de la Champions League en toda su historia, que sacó adelante un partido que parecía más complicado en la previa.
Frank Lampard diseñó una línea de cinco volantes para intentar frenar un mediocampo ultra aceitado con Valverde, Kroos y Modric. En esa zona, Fernández fue el vértice retrasado de un triángulo que completaron Kanté a la derecha y Kovacic a la izquierda, con Chilwell y James por las bandas.
La decisión del entrenador le dio un rol más defensivo al argentino, que jugó muy lejos del arco rival. Pisó el área grande en cuatro oportunidades (nunca la chica) y apenas tuvo un remate al arco, una de sus armas, que se fue desviado.
Enzo Fernández todavía no logra su mejor versión en Chelsea.
Ese lugar que adoptó en su llegada a Londres no le ha permitido aún estrenarse en la red con su actual club y apenas suma cuatro asistencias en sus 13 encuentros oficiales contando Liga y Champions.
Nobleza obliga, la actual versión de Énzo en la Selección argentina es la de volante central pero con libertades para jugar en campo rival. El planteo de ayer ante el Merengue lo tuvo abocado más al equilibrio y el primer pase en la salida. Recuperó diez balones pero hay un dato más que llamativo: tuvo 20 pérdidas de posesión, algo rarísimo en él.
Es verdad que lideró el número de toques de pelota (112) y que completó el 85% de sus 93 pases pero ninguno de ellos fue una daga para la defensa rival. Apenas dos intentaron llevar algo de peligro para convertirse en asistencia pero murieron en la intención.
En contexto, al equipo le cuesta horrores el gol: ha marcado apenas 12 tantos en 10 encuentros por el máximo torneo continental y otros 29 en 30 juegos de Premier League. Fernández ha jugado los 13 partidos como titular desde su llegada y es una pieza clave para intentar la remontada en Inglaterra. Claramente, puede dar mucho más. Chelsea lo necesita.
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